En 1917, Venustiano Carranza, presidente de México en aquel entonces, decretó que el 15 de mayo se iba a conmemorar como el Día del Maestro. La propuesta fue realizada por los diputados Benito Ramírez y Enrique Viesca, con el fin de tener un día para conmemorar la labor de los profesores.
Para elegir esta fecha, se tomaron en cuenta aspectos importantes tales como la Toma de Querétaro, suceso que marcó la caída del Segundo Imperio Mexicano comandada por Maximiliano de Habsburgo, y se consolidó la República en México. Otro aspecto, esta fecha coincidía con el nombramiento de Juan Bautista de La Salle como patrón de los maestros por parte del Papa Pio XII en 1950.
Esta fecha permite darle un valor especial a esta actividad de educador como pilar fundamental de la educación. Su invalorable labor permite forjar los cimientos sobre los que se sostienen los futuros ciudadanos y ciudadanas de México.