La IA siempre ha sido un tema de gran debate. Aunque la Inteligencia Artificial (IA) ya forma parte de nuestras vidas, lo cierto es que en en ámbitos como el de la educación avanza a un ritmo mucho más pausado. Educadores de todo el mundo anticipan que el papel de la Inteligencia Artificial aumentará drásticamente en los próximos años. Os explicaremos como:
Inteligencia Artificial en la educación
Como hemos mencionado anteriormente, la Inteligencia Artificial siempre ha generado debate. El conocimiento de la IA, como bien sabemos, proviene principalmente de las películas y libros de ciencia ficción. Las películas y novelas a menudo han retratado a la inteligencia artificial como la causa del genocidio y la destrucción, incluso científicos brillantes como Stephen Hawking argumentaron en contra de la creación de ésta. Pero muchos otros, cada vez más, justifican su invención para beneficiar enormemente a la humanidad. El fenómeno de la inteligencia de la máquina ya ha comenzado su integración con todos los sectores, incluido el educativo. Los educadores anticipan que el papel de la inteligencia artificial aumentará en grandes niveles en los próximos años.
La Inteligencia Artificial no solo tiene la capacidad de transformar los sistemas de administración existentes, que automatizan las operaciones administrativas a nivel institucional, sino que también tiene la capacidad de transformar tecnológicamente los métodos convencionales de enseñanza y aprendizaje. Para ello, se integra a la perfección con la tecnología eLearning y los sistemas de gestión de formación en línea (LMS), para introducir tecnología educativa, como Realidad Virtual y aumentada en las aulas que proporciona experiencias de aprendizaje y enseñanza en tiempo real a estudiantes y profesores.
El papel de la IA en la gestión administrativa
Actualmente, la dependencia de las instituciones educativas en los sistemas automatizados de gestión ERP (sistema de planificación de recursos empresariales) para llevar a cabo o supervisar las operaciones administrativas como el registro de estudiantes, asignación de cursos, reclutamiento de personal, recaudación de tarifas… etc, se espera que disminuya con la implementación de la Inteligencia Artificial. Esto se debe principalmente a que las aplicaciones gobernadas por la famosa IA no requieren ninguna interferencia humana para realizar las tareas deseadas mientras que los sistemas automatizados, a pesar de poseer características automáticas, requieren asistencia humana para realizar las operaciones.
Por ejemplo, para registrar a un estudiante en un curso basado en sus resultados, en su formación previa u otros aspectos utilizando un sistema automatizado de gestión de información de estudiantes (SIS), se requiere que un operador ingrese todos los detalles necesarios en el sistema para que éste pueda realizar el análisis y mostrar el mejor resultado entre los cursos disponibles. Si bien este proceso reduce la carga de la administración de procesar y analizar aplicaciones, aún requiere acciones manuales previas para su correcto funcionamiento. Ahora imagine realizar el mismo procedimiento utilizando un sistema impulsado por la Inteligencia Artificial donde todas las operaciones -desde la recepción automática de los datos del formulario en línea hasta la asignación de candidatos al curso adecuado según su lista de prioridades- se realicen sin necesidad de asistencia humana.
Actualmente, la seguridad de los datos es una de las mayores preocupaciones para las organizaciones educativas. Las instituciones educativas, como colegios, universidades y centros de formación tienen una gran cantidad de información confidencial relacionada con los estudiantes, profesores, inscripciones… La utilización de la IA, no sólo elimina la necesidad de asistencia humana, sino que también elimina el riesgo de pérdida de datos y ciberhacks.
El papel de la IA en la gestión académica
El principal sector de personal que se puede beneficiar notablemente con la adopción de la tecnología de la Inteligencia Artificial es el personal académico, es decir, profesores y docentes. El motivo es la gran capacidad de la Inteligencia Artificial para calificar automáticamente los trabajos, autoevaluar y asignar tareas… Se trata de una herramienta perfecta para que los educadores simplifiquen su trabajo notablemente. Pero la capacidad de la IA no acaba ahí: mejora el aprendizaje personalizado e individualizado al integrarse a la perfección con los sistemas de gestión de formación en línea para compartir materiales de estudio, navegar a través del contenido de cada lección, crear y reproducir vídeos educativos, presentaciones, ilustraciones, imágenes, audios, etc. Y al mismo tiempo, permite a los estudiantes realizar pruebas y exámenes en línea desde sus smartphones, tabletas, ordenadores y otros dispositivos electrónicos.
Además, la Inteligencia Artificial fomenta el aprendizaje electrónico con el fin de mejorar los métodos de aprendizaje personalizados. La IA en educación incorpora diferentes marcos y herramientas que enfatizan la estructura, la investigación y el desarrollo así como la administración y evaluación de procedimientos para facilitar la enseñanza y el aprendizaje.
Conclusión
Contrariamente a la creencia popular, utilizar la Inteligencia Artificial en la educación no es tan mala idea. La realidad es que el ámbito de la educación es precisamente uno de los que podría verse más reforzado y transformado gracias a los nuevos sistemas de Inteligencia Artificial por su gran capacidad de contribuir a la personalización del aprendizaje. Al igual que cualquier otro elemento, la IA tiene ventajas y desventajas. Se vuelve difícil avanzar y evolucionar si nos concentramos más en los inconvenientes, en lugar de beneficiarnos de las ventajas.
Fuente: Elearningactual.com
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