Según un nuevo análisis sobre la educación preescolar a nivel mundial publicada por la organización benéfica Theirworld, millones de niños no conseguirán desarrollar todo su potencial a menos que los gobiernos aumenten urgentemente su compromiso con la educación preescolar para todos los niños y las niñas.
El análisis indica el nivel de ayuda destinada a la educación preescolar a escala mundial. Theirworld se propone mejorar la vida de los niños y ofrecer a cada uno de ellos la oportunidad para desarrollar su potencial.
En 2014 la educación preescolar no recibió más que un 1,15% de la ayuda total para la educación, mientras que la tasa mundial de matriculación en la enseñanza preescolar cayó a un 44%, cifra que pone de relieve que más de la mitad de los niños y niñas del mundo siguen estando excluidos de los beneficios de la educación preescolar. En 2014, en los países de renta baja apenas se matricularon un 17% de los niños.
Financiación insuficiente
En 2014, la educación superior recibió más del 40% de la ayuda total para la educación – lo que demuestra la limitada prioridad y escasa financiación de que goza la educación preescolar.
Esto es preocupante, puesto que la evaluación publicada muestra que las desigualdades de desarrollo y la falta de acceso a las competencias cognitivas y sociales que la educación preescolar fomenta en los niños con edades comprendidas entre los tres y cinco años – como por ejemplo la iniciación temprana a la lectura y las matemáticas, y la interacción social — pueden tener repercusiones permanentes en la salud física y mental del niño, en su capacidad de aprendizaje, en su comportamiento y en las posibilidades de que desarrolle todo su potencial al comenzar la enseñanza primaria. La educación preescolar proporciona al niño una mejor preparación escolar, lo que conduce a un mayor rendimiento académico y reduce las probabilidades de que el niño repita curso o abandone el colegio.
Promover la equidad
El desarrollo de la primera infancia (ECD, por sus siglas en inglés) es por tanto una de las estrategias más rentables y acertadas para promover la equidad de los niños desfavorecidos y eliminar lo antes posible las diferencias de rendimiento, puesto que los beneficios son mayores para los niños más marginados y desfavorecidos.
La evaluación pone de relieve que el Objetivo de Desarrollo Sostenible núm. 4 requiere el logro de una educación preescolar universal para 2030. Theirworld advierte de que, al ritmo actual, esa meta no va a poder alcanzarse.
Se trata de la primera de una serie de evaluaciones sobre ECD en el marco de la campaña “Best Start” de Theirworld, donde se subraya la importancia y la necesidad de la aplicación de medidas en materia de ECD.