Los investigadores de la fundación suiza Jacobs han hablado con más de 50.000 niños de quince países para averiguar lo que piensan sobre sus familias, derechos, vida escolar y aficiones.
La mayoría de los niños de entre ocho y doce años de edad están en general contentos con su vida, informa la página oficial de la fundación.
Los niños más felices del mundo viven, según el estudio, en Turquía, Rumanía, Colombia y Corea del Sur. En Turquía, por ejemplo, el 78% de los encuestados evaluaron su vida en 10 puntos en una escala de 10.
El estudio también ha revelado otras diferencias curiosas. Por ejemplo, que en general ‘el nivel de la felicidad’ es el mismo para los niños y las niñas; o que a los pequeños de los países nórdicos de Europa les preocupa más su apariencia y también son más tímidos que sus compañeros de los países africanos y sudamericanos.
La investigación se centra en la vida personal y escolar de los menores. Los resultados muestran que el 61% de los pequeños nepalíes no viven solo con sus padres, sino también con sus abuelos, mientras que solo el 10% de los niños del Reino Unido, Estonia y Noruega están en contacto permanente con sus abuelos. Además, los estonios y los polacos pasan más tiempo haciendo los deberes que, por ejemplo, los ingleses y los surcoreanos.
Se sabe también que los niños de Nepal, Argelia y Sudáfrica suelen pasar su tiempo libre cuidando a sus hermanos y familiares, y en Israel y Noruega viven los niños más aficionados a practicar deporte.
Entre los datos obtenidos también destaca la información sobre el conocimiento de los niños de sus derechos. Así, el 77% de los pequeños noruegos dicen que están al tanto de sus derechos en comparación con tan solo el 36% de los ingleses. Más aún, el 84% de los menores entrevistados en Noruega están convencidos de que los adultos respetan los derechos de los niños.
1 comentario
Interesante el estudio por la temática abordada, en realidad son variables de impacto a las cuales podríamos incorporar, en nuevos estudios, su relación con la felicidad de sus padres, familia, su relación con el uso de las tecnologías de información y comunicación; también sería importante conocer sobre la determinación de la muestra.
Según el estudio se resalta el calor familiar en el desarrollo afectivo de los niños y niñas.
Saludos cordiales;
Ewer Portocarrero
Huánuco – Perú