Desde hace prácticamente 2 años la mascarilla es un complemento más debido a la pandemia del coronavirus. Para la gran mayoría es algo incómodo aunque nos hemos acostumbrado y se ha demostrado su eficacia para minimizar la transmisión del covid, pero los niños que han nacido o crecido en pandemia, no conocen un mundo sin mascarillas y les está pasando factura.
La pandemia ha supuesto un punto de inflexión en el antes y en el después a la hora de comunicarnos y, una vez más, los más pequeños han sido los más perjudicados. Expertos en Educación Infantil han advertido que el desarrollo del lenguaje y de las emociones es lo que más les está afectando debido al uso de las mascarillas.
Las medidas adoptadas para hacer frente al coronavirus han supuesto una gran falta de socialización en general, pero, sobre todo, para los niños: constantes confinamientos de aulas, distancia social, aulas burbuja, retirada de juegos en los patios, uso de las mascarillas, etc.
Esta situación ha hecho que nos comuniquemos mucho más con los ojos y el cuerpo, pero ha creado un gran problema: ha ralentizado el aprendizaje de los más pequeños, aquellos que están empezando a aprender hablar o a leer. Las mascarillas están afectando gravemente al desarrollo del lenguaje.
En definitiva, las mascarillas complican claramente el desarrollo del lenguaje, tanto en la lectura labial, algo que ayuda a la vocalización, imitación y producción; como a la discriminación auditiva, debido a la distorsión del sonido, al no entenderse bien determinadas palabras.
Esto hace que la comprensión del mensaje también se vea afectada. Los menores adquieren el lenguaje a través de la discriminación auditiva y visual, es decir a la hora de pronunciar también se apoyan en la vocalización correcta y posiciones de la lengua, por lo que con el uso las mascarillas se están viendo afectados gravemente en su desarrollo.
Pilu Hernández, maestra, experta en educación de familias y formadora, ofrece algunos consejos para intentar paliar el impacto de las mascarillas en el aprendizaje tanto en los colegios como en casa.
¿Qué hacer para reducir el impacto de las mascarillas en los colegios?
- Modular la voz y utilizar entonaciones y sonidos exagerados para transmitir al niño lo que la mascarilla nos tapa.
- Gesticular mucho. Los apoyos visuales en esta pandemia se han vuelto nuestros grandes aliados en las aulas.
- Utilizar pictogramas. Son de gran ayuda a la hora del aprendizaje del lenguaje y la lectoescritura.
¿Qué podemos hacer en casa?
- Vocalizar exageradamente para que nos pueda imitar.
- Procurar hablarles siempre a la cara, evitar darles la espalda.
- Leer todos los días con ellos y después hablar de la lectura, trabajando así la comprensión lectora.
- Si pronuncia mal alguna palabra, corregirle, pero nunca decirle que está mal. Si el error continúa, hablar con el centro para que se trabaje en coordinación.
- Jugar a las muecas, películas o tabú. Todos estos juegos harán que los pequeños tengan riqueza de vocabulario, así como expresión corporal a la hora de comunicarse con los demás.
Fuente: diariocritico.com