La Real Academia Española ha realizado un verdadero esfuerzo de síntesis para reunir «lo esencial» de la ortografía de la lengua española en un manual destinado a escolares, en el que de forma «muy clara y sencilla» se exponen todas las reglas necesarias para escribir bien el español.
Este manual, publicado por Espasa, tiene tan solo 63 páginas y acaba de llegar a las librerías españolas al precio de cinco euros.
En los próximos meses se irá poniendo a la venta en los distintos países hispanoamericanos, dado que su contenido ha sido consensuado por las veintidós Academias de la Lengua Española, igual que sucedió con la «hermana mayor», la Ortografía publicada en diciembre de 2010, y con la Ortografía básica, de marzo del 2012.
La Ortografía escolar de la lengua española no contiene novedades. La doctrina sigue siendo la misma que la de 2010, incluidas aquellas normas que causaron polémica, entre otras las relacionadas con la supresión de la tilde en monosílabos con diptongo ortográfico como guion, truhan o Sion.
También causó revuelo la recomendación de suprimir la tilde en el adverbio solo y en los pronombres demostrativos, incluso en casos de posible ambigüedad («voy solo al cine» o «llega esta tarde»). Y fue polémico el deseo de unificar las distintas denominaciones que reciben en cada país las letras del alfabeto y pretender, por ejemplo, que se llame «ye» a la «i griega».
Al final la sangre no llegó al río y se recomienda decir «be», «uve», «uve doble» y «ye», pero se deja libertad para llamarlas, allí donde sea costumbre, «be larga» o «be grande»; «ve corta» o «ve baja»; «ve doble», «doble ve» o «doble uve», e «i griega».
Como destacaba hoy en declaraciones a Efe el académico español Salvador Gutiérrez, coordinador de las diferentes ediciones de la Ortografía, el nuevo manual intenta hacer «más cercana y fácil» para todos los estudiantes esta materia, «de enorme importancia cultural y social».
«Está destinada a todos los niños y jóvenes a partir de los diez años, y puede ser útil para cualquier edad, hasta los 110 años», dice con humor Gutiérrez, catedrático de Lingüística en la Universidad de León y gran experto en estas materias.
La Ortografía escolar de la lengua española, que se presentará en octubre en Panamá, en el Congreso Internacional de la Lengua, no busca exhaustividad sino que selecciona las normas según su importancia. «Es muy clara, sencilla y simple, en el mejor sentido de la palabra». Y es «muy didáctica».
Esa sencillez y brevedad no impiden que se mantengan todas las normas y que las definiciones, «sin ser muy elevadas, traten de ser precisas, exactas», añade el académico.
En cada capítulo hay una introducción, en trama gris, con los conceptos básicos que van a ser necesarios para entender lo que viene a continuación. Abundan los cuadros de diferentes tipos y los ejemplos.
Como en las ediciones más amplias de la Ortografía académica, en la escolar se insiste en que el prefijo ex- debe escribirse unido a la base léxica si afecta a una sola palabra: exmarido, exministro, expresidente, pero se dirá ex capitán general.
Y se recuerda que no se escriben con mayúscula inicial los sustantivos que designan títulos nobiliarios, dignidades y cargos (ya sean civiles, militares, religiosos, públicos o privados), y se deberá poner majestad, rey, reina o el papa.
Las Academias de la Lengua Española consideran admisible que se prescinda de las mayúsculas en los mensajes de móvil y en los chats, pero no en las comunicaciones electrónicas, en las que se deben «aplicar con rigor las normas ortográficas».
Como señala Gutiérrez, el lenguaje que se utiliza en las redes sociales, los sms y los chats quizá no potencien la mejor ortografía, «pero lo que favorece las faltas es la ausencia de práctica, de horas dedicadas a escribir correctamente en el aula, en familia e individualmente».
Fuente: Agencia EFE